El punto realmente poderoso en este título es sin duda su jugabilidad, no se puede esperar menos de Platinum Games (Metal Gear Rising, Vanquish o Nier: Autómata) entre otros. La precisión y suavidad de movimientos hacen las delicias del jugador, que puede sumergirse en la acción sin trabas de ningún tipo. Una experiencia todavía puntera en el género después de tantos años.
Pero si hablamos de sumergirnos en el juego no podemos pasar por alto al gran personaje que sostiene todo el conjunto. Bayonetta es una magistral muestra de carisma en estado puro, Hideki Kamiya (Director) se gana aún más si cabe mis respetos después de haber descubierto a esta musa del inframundo. Sin duda no te dejará indiferente.
El juego tiene un tempo a mi entender perfecto, ni muy largo ni muy corto, te ofrece la dosis justa de desafío, como para querer repetir subiendo de dificultad nada más terminarlo. Porque además terminarás siendo una auténtica máquina de hacer combos imposibles. La curva de aprendizaje en este sentido es impecable.
La trama no es lo más importante en este género, pero igualmente te mantiene atento debido al misterio con el que la presentan. Te la irán desvelando en pequeñas dosis, en forma de textos o escenas de vídeo muy apañadas (hay escenas de combates realmente épicas) y al final del juego, te quedará una gran sonrisa de satisfacción en la cara, eso te lo garantizo.